Construiría un gran refugio animal y me convertiría en un rescatista de animales callejeros, la responsabilidad y el cariño van de la mano.
Podrías viajar al Tíbet y meditaría como lo hacen los monjes. Practicaría el tantra diariamente. Espiritualidad y sexo, ¿por qué no supe de esto antes?
Pasaría el tiempo escuchando historias de los abuelos en un asilo de ancianos sin morir de aburrimiento. Dedicación y fe pueden serlo todo en la vida.
Tomaría más tepache, comería ceviche de cerdo y desarrollaría una mejor técnica para romper huevos. Jerez, rompope, huevo, leche y azúcar hacen una polla.
Viviría eternamente y moriría todos los días. Quizá ser eterno no lo es todo y aún la muerte podría ser vencida.
Escalaría la torre latinoamericana como el hombre mosca y saltaría de un avión en paracaídas. Si mi condición física me lo permitiera.
Aprendería a eructar el abecedario, tejería un sueter de cuello de tortuga y buscaría la ramita “tenme acá”.
Fundaría una asociación para clones caídos, vendería copias de la vara mágica de Harry Potter y un Hobbit sería mi esclavo personal. A veces la realidad supera a la fantasía, otras veces no.
Si hoy decidiera cometer una locura dejaría de buscar y comenzaría a encontrar, porque toda locura halla fuerza en un propósito verdadero.
Feliz año a todos
Escrito después de haber bebido
1 Michelada
1 Hierbabuena
Real mascusia